La realidad es que el social commerce puede ser una estrategia de venta online muy efectiva para algunas marcas con tiendas online. Pero, ¿qué significa? ¡Lo vemos!
Social commerce: qué es
Ya hace unos años que la tendencia a realizar cada vez más compras online es una realidad, al mismo tiempo que las redes sociales continúan siendo altamente populares y forman parte de la vida de un buen puñado de usuarios que compran por Internet.
El «social commerce» o comercio social es un subconjunto del comercio electrónico que implica la venta de productos directamente a través de las redes sociales. Se basa en la utilización de plataformas de medios sociales para facilitar la interacción y la promoción de productos o servicios, permitiendo a los usuarios realizar compras sin tener que salir de estas plataformas.
El comercio social aprovecha las características de las redes sociales, como los likes, las shares, los comentarios y las reseñas, para influir en las decisiones de compra de los usuarios y ofrecer una experiencia de compra más integrada y social, sin embargo, en esencial tener muy bien definido al target o cliente ideal.
Los perfiles en las redes sociales ayudan a atraer clientes potenciales
A través del inbound marketing y el marketing de contenidos, las empresas pueden ganarse la confianza de los clientes. Y es que, esa confianza en la marca es la que anima a los usuarios a dar el paso hacia esa primera experiencia de compra, que sin duda puede marcar el futuro de la tienda.
Plataformas como Instagram, Facebook, Pinterest y TikTok han desarrollado funcionalidades específicas para apoyar el comercio social, haciendo que sea más fácil para las marcas crear experiencias de compra atractivas y fluidas para los usuarios.
Varias marcas, conscientes de las particularidades de su sector y del perfil de su público objetivo, han reconocido que sus clientes potenciales están activos en las redes sociales. Estos usuarios, individuos reales con intereses y necesidades específicas, representan un mercado objetivo que podría mostrarse receptivo a los productos y servicios que las marcas ofrecen. Esto subraya la importancia crucial del comercio social, ya que proporciona un puente directo entre las marcas y sus consumidores en un entorno donde pueden interactuar de manera auténtica y personalizada y en muchas ocasiones, a tiempo real.
¿Qué estrategias de marketing se pueden aplicar al comercio social?
- Páginas de venta (landing pages) y tiendas dentro de las redes sociales: Muchas plataformas de redes sociales permiten a las marcas crear tiendas dentro de sus perfiles donde los usuarios pueden explorar, seleccionar y comprar productos directamente.
- Publicaciones y anuncios shoppable: Son publicaciones o anuncios que permiten la compra directa de productos a través de etiquetas y enlaces integrados que llevan directamente a la opción de compra.
- Influencer marketing: La colaboración con influencers para promocionar productos o servicios a su audiencia, aprovechando su credibilidad y alcance para impulsar las ventas.
- Funciones de compra integradas: Como botones de compra que se integran en las plataformas sociales, permitiendo transacciones rápidas, cómodas y seguras sin necesidad de abandonar la aplicación.
Un ciclo de venta diferente respecto al ecommerce
Hay tiendas online que no apuestan por el social commerce, lo que les puede hacer perder importantes oportunidades. Por ello, no hay que confundir ecommerce con social commerce, dado que son complementarios.
Es decir, la venta en las tiendas online se producen después de que el usuario haga una búsqueda en Google (orgánica o vía SEM) o bien entrando directamente a la web de la marca. Mientras que la venta vía social commerce se produce fruto de las relaciones sociales entre los usuarios o de los usuarios con la marca en una plataforma de terceros, es decir, redes sociales.
La principal diferencia es que, en estos tipos de venta, no es tan relevante el posicionamiento orgánico o la publicidad en buscadores, sino más bien todo lo que se ha dicho sobre la marca en las redes; reputación de marca, comentarios, recomendaciones, comparticiones, likes, etc, aunque depende mucho del tipo de servicio o producto que ofrezca la marca y su potencial en cuando a redes sociales.
Como ves, el social commerce es ya una poderosa herramienta de marketing y ventas para las empresas de todos los tamaños, permitiéndoles llegar a un público más amplio, interactuar de manera más efectiva con sus clientes y aumentar sus ventas de manera más orgánica y menos intrusiva.
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