La encriptación es un término muy popular en materia de datos y de informática. Pero, ¿sabes qué significa? Si te interesa la seguridad y la privacidad, no te pierdas esta lectura:
Encriptación: qué es
Para hablar de encriptación, tenemos que hablar de criptografía, de cifrado. Es un procedimiento que emplea un algoritmo de cifrado y que permite transformar un mensaje, para que no se pueda comprender si no se tiene la clave del algoritmo.
Gracias a esta técnica de seguridad, podemos reducir los riesgos que supone el uso de la tecnología. ¿Cómo? Codificando la información para que se pueda transmitir de forma segura de tal forma que solo el emisor y el receptor puedan leerla.
Para ello, los datos se convierten de un formato legible a un formato codificado, de manera que solamente se pueda conocer el contenido real tras descifrarlos.
Tipos de encriptación
Dependiendo del tipo de claves que se utilicen, tenemos distintos tipos (por lo menos que te suenen).
- Encriptación simétrica: se emplea la misma clave tanto para cifrar como para descifrar los datos. En este punto tenemos sistemas de encriptación simétricos como AES (Advanced Encryption Standard), DES (Data Encryption Standard) y Triple DES.
- Encriptación asimétrica: se basa en una clave pública para cifrar y una clave privada para descifrar. Se pueden emplear los métodos de ElGamal (Taher ElGamal) y RSA (Rivest, Shamin y Adleman).
Según algoritmos, tenemos:
- Encriptación en flujo: se emplean largas claves para cifrar que se pueden crear de forma aleatoria a partir de un generador de claves o pueden ser predeterminadas. Se emplea habitualmente en conversaciones de teléfono y aplicaciones de audio y video en tiempo real.
- Encriptación por bloques: en este otro tipo, los datos a encriptar se van descomponiendo en bloques y se encriptan cada uno de ellos. Aquí destacamos los sistemas de encriptación DES y Triple DES.
¿Por qué usar la encriptación?
Sin lugar a dudas, el hecho de encriptar los datos nos da beneficios en cuanto a la protección de la privacidad de los usuarios. En estos tiempos en los que es tan importante, no se debe dejar en el aire, sino que debe estar encriptado.
Por ejemplo, las páginas web, suelen contar con un certificado SSL, que no es más ni menos que un protocolo de seguridad que permite que todos los datos se encripten entre servidor y usuario.
Pero esto no es todo, porque el cifrado de los datos también evita ciertos ataques como los fraudes bancarios, un posible robo de identidad, pérdida de los dispositivos, etc. Digamos que, todo está protegido por una capa.
Un ejemplo popular de su uso -> WhatsApp
Dentro de la encriptación, nos encontramos con empresas y apps que hacen uso de ello. Por ejemplo, WhatsApp, que cuenta con el cifrado de extremo a extremo.
Hace unos años, hubo mucha polémica en torno al cifrado de las conversaciones, por eso los reyes de la mensajería instantánea se aseguran de que todo esté correcto, sabiendo que solo el emisor y el receptor tendrán acceso a la misma. Por supuesto, el desarrollador de WhatsApp no puede leer el contenido.
De hecho, esto no es todo, porque la compañía ya está trabajando en la encriptación de las copias de seguridad locales. Es más, la mayoría de servicios cifran automáticamente los archivos para que el usuario no tenga que hacer nada y toda la información quede totalmente protegida.
¿Te ha quedado alguna duda sobre encriptación y cifrado? ¿Necesitas que tu página web sea segura? Pregúntanos para que podamos echarte una mano 😉
